Se realizan los ensayos específicos para controlar que las aguas son aptas tanto para el amasado como para el curado del hormigón en obra, según recoge el artículo 29 del Código Estructural 2021. Dicho artículo establece que tanto para el amasado como para el curado del hormigón en obra, el agua no debe contener ningún ingrediente perjudicial en cantidades tales que afecten a las propiedades del hormigón o a la protección de las armaduras frente a la corrosión.
Las aguas deben cumplir las siguientes condiciones:
– exponente de hidrógeno PH >= 5
– sustancias disueltas <= 15 gramos por litro (15.000 p.p.m)
– sulfatos expresados en SO <= 1 gramo por litro (1.000 p.p.m) excepto para cementos SR en que se eleva este límite a 5 gramos por litro (5.000 p.p.m)
– ión cloro, CL
* para hormigón pretensado <= 1 gramo por litro (1.000 p.p.m)
* para hormigón armado u hormigón en masa que contenga armaduras para reducir la fisuración <= 2 gramos por litro (3.000 p.p.m)
– Hidratos de carbono 0
– sustancias orgánicas solubles en éter <= 15 gramos por litro (15.000 p.p.m)